ECONOMÍA/MACRO

Ocaña niega que el Gobierno esté presionando a los inspectores fiscales para recaudar más


   BRUSELAS, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -


   El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, negó hoy que el Gobierno esté presionando a los inspectores fiscales para aumentar la recaudación y destacó que "perseguir el fraude fiscal" entra dentro de las "funciones normales" de la administración tributaria para "asegurarnos de que las empresas y los ciudadanos paguen sus impuestos".

   La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado denunció la semana pasada que la Agencia Tributaria les ha exigido mejorar en un 15% sus objetivos para este año, lo que a su juicio les obliga a un trabajo precipitado y a abandonar las investigaciones más complejas.

   "No es verdad que haya habido ningún cambio recientemente", dijo Ocaña al ser preguntado por estas críticas tras comparecer ante la comisión de control presupuestario de la Eurocámara. "El sentimiento de la mayoría de los inspectores y del personal de la Agencia desde luego que no es ese", resaltó.

   "La agencia tributaria existe para luchar contra el fraude, así que no puedo entender que sea un motivo de queja el que intentemos que la Agencia haga precisamente la razón por la que existe, perseguir el fraude fiscal", insistió el secretario de Estado de Hacienda.

   Ocaña avanzó que el plan de lucha contra el fraude fiscal que el Gobierno tiene previsto aprobar la semana que viene tiene como objetivo "mejorar en la coordinación entre la prevención del fraude fiscal y la del laboral, coordinar las actuaciones de la Agencia Tributaria y de la Inspección de Trabajo". "Ahí hay sinergias claras que se pueden obtener", apuntó.

   Además, se prestará menos atención al fraude en el sector inmobiliario, ya que "ahora ese no es el problema, entre otras razones porque hay mucha menos actividad en ese sector". En su lugar, los recursos se redirigirán a "empresas que hacen una actividad económica sumergida frente a una actividad económica aflorada, normal, que podían hacer en otros momentos".

   "Son mejoras de gestión fundamentalmente, pero que redundan en una mayor eficacia en la lucha contra el fraude y también por tanto en una mayor justicia porque el fraude es la antítesis de la equidad. Si hay menos fraude conseguiremos que se repartan las cargas más igualitariamente entre todos", indicó Ocaña.

   El secretario de Estado de Hacienda defendió que en la lucha contra el fraude fiscal "hay que ser activos en todos los frentes" y no concentrarse únicamente en las grandes empresas, que en todo caso ya cuentan con una oficina especial dentro de la Agencia Tributaria.