Andalucía

REPORTAJE

El Estatuto empieza por la hacienda

La ley de Agencia Tributaria que surge del nuevo texto supera su primer trámite

ISABEL PEDROTE - Sevilla - 11/10/2007

El desarrollo del nuevo Estatuto de Autonomía ha comenzado por la hacienda. El proyecto de ley de creación de Agencia Tributaria de Andalucía, que emana directamente del nuevo texto, superó ayer su primer trámite parlamentario, al no prosperar las enmiendas a la totalidad que habían presentado PP y PA. La futura agencia gestionará los tributos propios de Andalucía y los cedidos totalmente por la Administración central, es decir, todos menos el IRPF, el IVA, los impuestos especiales y el de sociedades.

Se trata de la primera norma discutida en la Cámara autonómica -junto a la del Consejo Andaluz de Concertación Local, que también se debatió ayer- que sale directamente del nuevo Estatuto (artículo 181). El consejero de Economía, José Antonio Griñán, explicó la prioridad de esta ley en la "sustantiva importancia" que tendrá la agencia en la nueva configuración de las relaciones tributarias entre Andalucía y el Estado, "una pieza esencial de la autonomía andaluza".

Frente a las críticas que recibió de los grupos de la oposición, aseguró que no supondrá duplicar trámites ni obligará a los ciudadanos andaluces a una doble exigencia por un mismo hecho imponible.

En el transcurso del debate fueron frecuentes las comparaciones con Cataluña, comunidad que siempre está presente en el Parlamento andaluz cuando se habla de autonomía. En este sentido, el portavoz del PP, José Enrique Fernández de Moya, alertó contra el "desafío" que, en su opinión, supone la Agencia Tributaria catalana para el equilibrio de las comunidades.

Las agencias de las dos comunidades son muy similares: tienen igual naturaleza e idénticas funciones, aunque la andaluza se configura como una agencia de régimen especial de gestión, con consecución de objetivos y responsabilidad por los resultados.

La diferencia estriba más bien en las intenciones de los políticos de Cataluña y Andalucía. Mientras José Antonio Griñán habló de cooperación con el Estado, a través de la creación de un consorcio paritario con la Agencia Estatal de la Administración Tributaria, el consejero catalán de Economía, Antoni Castell, expresó su temor, cuando se aprobó la norma en Cataluña, de que se plantee un modelo de consorcio como una superestructura de dirección, pero sin contenido.

La Generalitat espera que el consorcio tributario abra las puertas a que se convierta en la única administración tributaria en Cataluña, y que vaya asumiendo la gestión de todos los impuestos, incluidos los no cedidos, como el de sociedades.