Solbes indicó que la intención del Ministerio de Hacienda es ofrecer en un tiempo relativamente corto los elementos básicos de la reforma fiscal para que la opinión pública y, principalmente, la clase empresarial, conozca las principales reformas que quieren acometerse.

"Como sé que hay preocupación sobre estos temas en el mundo empresarial, nuestro objetivo es en las próximas semanas, no plantear la reforma detallada, pero sí unas grandes líneas para que todo el mundo conozca en qué estamos pensando, y esto se podrá hacer en un periodo relativamente corto", subrayó Solbes.

En cualquier caso, el vicepresidente aseguró que la reforma fiscal que planteará el Gobierno tendrá en cuenta ciertos límites, como la necesidad de que se trate de una reforma que pueda financiarse y sea suficiente para financiar las necesidades de gasto, así como la conveniencia de que parta de la realidad actual para corregir lo que es "incorrecto" y respetar lo "correcto".

Según explicó Solbes, la reforma también deberá tener en cuenta el entorno de economía abierta en el que se mueve España, ya que determinado tipo de decisiones pueden verse afectadas por la libertad de movimientos de capital, en alusión a los posibles cambios en la tributación de las plusvalías.

Junto con las líneas básicas de la reforma fiscal, Solbes anunció que también se presentarán en las próximas semanas un conjunto de medidas elaboradas por el Observatorio de la Productividad, integrado por diferentes departamentos ministeriales, para mejorar la competitividad y el aumento de la productividad de la economía española, así como el Plan de Fomento Empresarial.

En este sentido, el ministro destacó que la política económica del Gobierno se centrará, junto con la apuesta por la mejora de la competitividad, en la estabilidad presupuestaria y la mayor transparencia de la información y las actuaciones del sector público.