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Estrella Económica - Economía 

15 de enero de 2004  



Cinco Días (15-1-2004)

Rato recurre al 'nunca antes en la historia' para ensalzar los cambios económicos introducidos por el PP desde 1996

Sigue sin desvelar si irá a las elecciones como número dos de los populares por Madrid, pero afirma que “ni mi madre se cree” que sea indispensable

M. Suchowolski

Madrid

El vicepresidente primero del Gobierno, Rodrigo Rato, sigue sin desvelar si aceptará ser el número dos en las listas populares por Madrid de cara a las elecciones de marzo, pero ayer, durante la presentación de un extenso balance de la labor que el PP ha realizado en el área económica desde 1996 bajo su dirección, se preocupó por asegurar que en el partido no se van a volver locos si sale de la primera línea política.

"Ni mi madre se cree" que sea indispensable, dijo Rato en el transcurso de una intervención en la que constantemente estableció comparaciones entre el terreno andado por el Gobierno de José María Aznar en materia económica y la anterior etapa socialista. "He contado con el mejor equipo económico de la reciente historia de España", apuntaba ayer el ministro, flanqueado por el secretario de Estado de Economía, Luis de Guindos, y el de Energía y Pymes, José Folgado. Con funcionarios "excelentes, leales y dedicados, puedo tener una gripe, que no pasa nada".

El hilo conductor de todo el discurso fue el giro radical que, según el ministro, ha dado el PP a la economía española en todos los ámbitos. Una evolución que en muchos de los casos, afirmó, no se había visto nunca antes. Las referencias a la etapa socialista fueron constantes. Desde 1996 hasta la fecha se han creado unos 4,3 millones de puestos de trabajo pero, según sus cálculos, de haberse mantenido el mismo crecimiento y ritmo de creación de empleo que había entonces, en estos ocho años sólo se habrían podido contabilizar 2,5 millones de nuevos empleos.

El vicepresidente económico del Gobierno dio un amplio repaso a todas las iniciativas tomadas por el PP desde que subió al Gobierno en 1996 y que habrían sido las responsables de que España pueda ahora crecer más que la UE y crear mayor cantidad de empleos pese a la ralentización económica actual. Rato no se olvidó de reseñar las dos rebajas del IRPF introducidas por el PP y otras iniciativas fiscales como la práctica supresión del Impuesto de Actividades Económicas, la consecución del equilibrio presupuestario y las reformas de los modelos de financiación autonómica y local.

En el ámbito financiero tampoco faltaron los recordatorios sobre los nuevos modelos de buen gobierno corporativo y políticas de transparencia, pero el ministro incidió especialmente en las políticas de privatizaciones. "Nunca antes en la historia de España", subrayó, se había producido una transferencia de rentas de las grandes empresas a los ciudadanos. En este punto puso el ejemplo del ahorro que ha supuesto a los consumidores españoles la rebaja de tarifas aplicada entre 1998 y el 2002 en las telecomunicaciones (35.971 millones de euros) y la electricidad (2.456 millones), que suponen un total de 38.427,32 millones.

Críticas al PSOE

Rato también tuvo tiempo para reiterar sus críticas al plan económico propuesto el pasado fin de semana por el líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre la base de que resulta difícil debatir con alguien, subrayó, que cambia de programa constantemente. En este sentido, se refirió especialmente a la propuesta de Zapatero de equilibrar las balanzas fiscales de las comunidades en fnción de una serie de referencias históricas, planteamiento, dijo Rato, "políticamente estéril" del que los socialistas saldrán "con muchos dolores de cabeza y los pies fríos".

De esta forma respondía al ser preguntado por un estudio elaborado por Funcas que muestra que siete autonomías tienen capacidad de financiación y son las que costean la necesidad de financiación de las diez restantes. El vicepresidente explicó que la balanza fiscal es un concepto limitado, pues no toma en consideración otros flujos económicos entre regiones ni distribuye entre las mismas el peso de la deuda pública. Además —nueva llamada al PSOE— consideró que ningún responsable político puede llegar a conclusiones constructivas a partir de este tipo de estudios, pues a menudo son "de encargo". Se dice: "quiero que salga esto", y así los resultados dependen "de lo que se ponga en la coctelera", afirmó.

“Un camino posible”

El ministro reconoció tener "cierta tendencia" a frenarse en las autocríticas —ayer volvió a derivar a las CCAA la responsabilidad de crear las condiciones que faltan para poder enfriar el mercado inmobiliario— y presentó un panorama económico para los próximos años en el que, en su opinión, el PP ha marcado "un camino posible", lleno de dificultades pero que da resultados, algo, dijo, que le había faltado a España durante mucho tiempo.

De cualquier forma, Rato parte de la base de que la variable económica no es el único gran aval con el que puede ir el PP a los comicios de marzo, y puso dos ejemplos, que en 1995 uno de cada cuatro españoles encuestados daban una enorme importancia al problema de la corrupción en el país —asunto hoy "desaparecido" de las preocupaciones de los ciudadanos, según Rato—, y que el 2003 ha sido el año con menos asesinatos vinculados al terrorismo. Así, para Rato, la desaparición de la corrupción y las políticas anti-ETA desarrolladas durante las dos últimas legislaturas pesarán "muchísimo" en la decisión que tomen los españoles el 14 de marzo.



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