Este Real Decreto desarrolla reglamentariamente las mejoras de protección social aprobadas por el Gobierno en diciembre del 2002 y abril del 2003, y dirigidas a ampliar la protección social del colectivo.

Desde la entrada en vigor de este norma, los autónomos podrán acceder a la prestación por incapacidad temporal, tanto por enfermedad común, como por accidente de trabajo y enfermedad profesional, en las mismas condiciones que el resto de trabajadores.

En el caso de enfermedad común o accidente no laboral, todos los trabajadores por cuenta propia recibirán la prestación de la Seguridad Social a partir del cuarto día de baja, en lugar del decimoquinto como ocurre actualmente.

La cuantía de la prestación será del 60% de la base reguladora desde el cuarto hasta el vigésimo día de baja, y a partir de ese día y hasta el alta, será del 75%. Esta mejora beneficiará a los trabajadores por cuenta propia del Régimen Especial de Autónomos, del Régimen Especial Agrario y del Especial del Mar.

En lo que se refiere a la protección por accidente de trabajo y enfermedad profesional, la prestación se recibirá desde el día siguiente, al igual que en el Régimen General, y la cuantía de la misma será equivalente al 75% de la base reguladora.

El acceso a esta prestación será voluntario y será condición indispensable que el trabajador autónomo se haya acogido a la cobertura, también voluntaria, de la prestación por incapacidad temporal. La norma reglamenta, además, la correspondiente cotización.

Críticas de la oposición

Esta aprobación fue criticada por el secretario de Política Económica del PSOE, Jordi Sevilla, quien afirmó que el Gobierno de aprobar medidas relacionadas con los autónomos "a golpe de campaña electoral y no en función de los intereses" del colectivo, medidas que, según recordó, fueron presentadas por los socialistas en el Parlamento y rechazadas por la mayoría absoluta del PP.

En este sentido, Sevilla aseguró que "al ritmo" en el que el Ejecutivo de José María Aznar está dando vía libre a las propuestas que realizó en su día el PSOE "se tardarán siete campañas electorales" en conseguir que los autónomos disfruten de los mismos derechos que los trabajadores del Régimen General de la Seguridad Social.

También se mostró convencido de que el Ejecutivo gastará más dinero en promocionar las nuevas medidas para autónomos que en apoyar al colectivo de trabajadores por cuenta propia. "Queremos que el Gobierno saque la pata que metió al rechazar regular nuestras propuestas. Y queremos que lo haga con celeridad", subrayó.