El ex secretario de Estado de Hacienda, Enrique Giménez-Reina,
diseñó en 1992 la creación y funcionamiento de Gescartera en 1992,
según la Cadena SER. El que, hasta ahora, es el único responsable
político que ha tenido que renunciar a su puesto por este escándalo,
conoció al actual dueño de la agencia de valores, Antonio Camacho, a
finales de 1991, según la información difundida ayer por esta radio.
Se lo presentó su hermana Pilar, ex presidenta de esta empresa, que
ya trabajaba con Camacho y el padre de éste, José, en la agencia de
valores Bolsa Consulting. Enrique Giménez-Reyna había sido alto
funcionario de Hacienda y entonces trabajaba como asesor fiscal en
el despacho que compartía en Madrid con los hermanos Zurdo Ruiz
Ayúcar, una conocida familia de abogados que ayer no quiso confirmar
ni desmentir ninguno de los extremos de esta información.
Bolsa Consulting, siempre según esta información, tenía en ese
momento graves problemas financieros y sus responsables buscaban
soluciones. Se las dio Enrique Giménez-Reyna, quien convocó a
principios del 92 un almuerzo en un restaurante madrileño en el que
participaron los hermanos Giménez-Reyna, los hermanos Zurdo y los
Camacho, padre e hijo. Allí se cerró el acuerdo para que el despacho
Zurdo Giménez-Reyna pasara a asesorar a las empresas de Antonio
Camacho y allí se decidió crear la nueva sociedad, que se llamaría
Gescartera.
Según fuentes citadas por la SER, el ex secretario de Estado se
encargó personalmente de las labores de asesoría y remitió a Camacho
una propuesta por escrito para la creación y funcionamiento de
Gescartera. Poco después se firmó el contrato de servicios. El
despacho de Giménenz.Reyna empezó cobrando en el 92 por este
servicio una "iguala", un fijo de 250.000 pesetas mensuales. La
cantidad fue aumentando hasta llegar al medio millón al mes. La
asesoría duró tres años, durante los cuales eran frecuentes las
visitas del ex secretario de Estado a la sede de Gescartera, en la
calle Moreto de Madrid.
El contrato se rompió a finales de 1995 al disolverse la sociedad
que compartían Giménez-Reyna y los Zurdo por graves desavenencias
entre ellos. Según fuentes del sector citadas por la SER, los
hermanos Zurdo estaban muy molestos con las maniobras y operaciones
financieras poco claras que realizaba Giménez-Reyna con diversas
empresas.
Poco después de esta ruptura, en marzo de 1996, el PP ganó las
elecciones. Nada más llegar al poder, el entonces y ahora ministro
de Economía, Rodrigo Rato, nombró a Enrique Giménez Reyna director
general de Tributos de este ministerio. Comenzó entonces su carrera
política que, tras las elecciones del año 2000, dio un salto con el
nombramiento, tras la creación del ministerio de Hacienda, como
secretario de Estado. Hasta que estalló el escándalo de la agencia
que presidía su hermana y tuvo que dimitir.