IRPF.NET

Noticias Fiscales 20 de marzo de 1999


Los subinspectores  enviarán un informe a la Inspección de Servicios de Economía y a Administraciones Públicas sobre su conflicto con Hacienda.

La Asociación de Subinspectores de Tributos han exigido la rápida aprobación de la resolución que da cobertura legal a su trabajo. Los subinspectores afirman, en una nota, que, aunque la Agencia anunció hace ya dos meses la inminente aprobación de esta resolución la situación permanece estancada.

Este colectivo señala que el retraso en solucionar este conflicto está provocando entre este colectivo un cansancio generalizado por lo que esta Asociación remitirá un informe a la Inspección de los Servicios del Ministerio y a Administraciones Públicas.

El colectivo de subinspectores asegura que la Inspección Tributaria está perdiendo 1.000 millones de pesetas diarios, y explica que "esta sangría en la recaudación" es fruto de que más de 500 subinspectores están ultimando ilegalmente las comprobaciones que realizan "y más de 600 reciben presiones y coacciones para hacerlo", a pesar de que recuerdan que tanto el Gobierno como la Agencia Tributaria han confirmado por escrito que ultimar es competencia exclusiva del jefe de unidad.

Además, consideran que es "absolutamente imposible" que menos de 300 inspectores puedan ultimar las comprobaciones realizadas por cerca de 1.500 subinspectores, y asegura que ya se han constatado prescripciones por este motivo, "si bien la Agencia lo está ocultando con trucos informáticos".

La Asociación de subinspectores de Tributos elevó el pasado 2 de febrero a los miembros de la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados la petición de apertura de una comisión de investigación sobre el funcionamiento y resultados de la Inspección de la Agencia Tributaria en 1998, y ofreció al Parlamento su colaboración para facilitar esta labor.

A su juicio, la Agencia ha "inflado" los resultados de la inspección con un volumen "desproporcionado" de deuda en disconformidad y del "aumento desorbitado" en las llamadas actas por "edicto" (actas que se comunican al contribuyente publicándolas en el boletín oficial de cada provincia).

Los subinspectores señalan que estas actas se traducen en disconformidad, al estar el contribuyente no localizado, y son de imposible cobro.

No obstante, fuentes de Hacienda han reiterado que es "técnicamente imposible" manipular los datos, porque, cuando se cierra el año, lo único que se puede hacer es pedir que el ordenador "baje" todas las actas con la deuda instruida por cada inspector.


Página Anterior